Calibres

El calibre de pistola más popular del mundo es 9mm Parabellum. Se popularizó tiempo después de que la OTAN lo estableciera como reglamentario; es utilizado por la industria europea.

En Estados Unidos aparece en los años 80 un cartucho calibre 10 mm, con una potencia muy superior a la del 9 Parabellum. Fue adoptado por el FBI, lo que le dio popularidad inmediata hasta que su uso práctico demostró que la mayor parte de los agentes no tienen suficiente fuerza para controlar la puntería por el retroceso que provoca. Después apareció un nuevo calibre derivado del 10 mm, el.40 Smith&Wesson, más controlable, pero todavía más potente que el 9 Parabellum. Este.40 S&W es actualmente el calibre de pistola más popular en Estados Unidos, aunque también está extendido el 9x19 mm.

En España el ejército y la policía emplearon por motivos históricos (era el calibre de la primera semiautomática comprada por el ejército, de fabricación belga) hasta los años 1980 armas en calibre 9x23 mm (más conocido por 9 largo o 38 super, algo más potente que el 9 Parabellum) de forma que las armas tenían que ser producidas por fabricantes nacionales.

Todavía se emplean diferentes tipos de calibre.22 en las competencias de tiro deportivo y en las prácticas de tiro, por su bajísima potencia y gran control de disparo. Casi nadie lo usa para la defensa personal debido a su bajo poder de parada a pesar de ser igualmente mortífero, salvo algunas excepciones por su fácil disposición tanto del arma como del cartucho, y algunas veces por fuerzas especiales debido a la facilidad de ocultar armas pequeñas y el poco ruido del disparo.

En EEUU son bastante usados calibres gruesos de gran potencia, algunos más adecuados para la caza mayor con pistola que para la defensa personal, a causa del retroceso. Existen varios modelos en calibres magnum de revólver (.357 y .44), y otros para semiautomáticas (.45 y .50).